Ghost: La Sombra del Amor

Título Original: Ghost
Director: Jerry Zucker
Elenco: Patrick Swayze, Demi Moore, Whoopi Goldberg.
Estreno En EE.UU.: 13 de julio de 1990

Textos: Osvaldo Solorza

HASTA QUE LA MUERTE NOS SEPARE
¿Quién no habrá visto Ghost?. Difícil. Lo que pasa es que aunque la crítica nunca fue muy bondadosa con esta desgarradora historia de amor, es la más fiel representante de los deseos femeninos y del amor perfecto.
“Hasta que la muerte nos separe”, fue tan bien representado por Sam (Patrick Swayze), quien luego de haber sido asesinado en un callejón por un malhechor (latino para variar) debe lidiar con el hecho de dejar a su jovial esposa Molly (Demi Moore) viuda. Su sorpresa será mayúscula cuando se entere que fue su mejor amigo Carl (Tony Goldwyn), quien lo asesina por encargo y por el amor de su mujer.Cuento aparte es el momento en que Sam conoce a Oda Mae Brown – interpretada por Whoopi Goldberg, ganadora del Oscar por este papel- una divertida medium que hasta ese momento ni siquiera sabía que tenía poderes síquicos.

AMOR EN GREDA
Sabemos que las películas que quedan no son las que ganan más premios, sino las que dejan imágenes en nuestra retina. Ghost tiene escenas de sobra.

Enumeremos:
1 – Sam y Molly en su última noche juntos. Quién diría que hacer pocillos de arcilla seria tan sexy. Una escena que sería imitada y parodiada, pero jamás igualada. Inolvidable es la canción de Rightouse Brothers.

2- Sam logra mover objetos estando muerto. Que difícil aprender con ese profesor. Un fantasma del metro que lo único que quiere en su vida es fumar. Hasta nosotros saltamos cuando logra patear una lata de bebida.

3- Sam y Molly bailan a través del cuerpo de la medium. Polémica escena, claro se ve bonita, pero en realidad son dos mujeres bailando. Igual Whoopi Goldberg no era tan guapa como para decir que era una digna escena lésbica. Guacala.

4- El cielo es de los bueno, el infierno de los malos. Cuando los malos mueren unas terribles sombras se los llevan. Desde que la vi que soy un hombre bueno. Sólo por miedo a que vengan por mí.

5- Molly logra ver a Sam. Al final de una película de actuación ciega, Demi mira a los ojos a su amado e incluso logra darle un beso, aunque se nota que se lo da al aire. Un final que saca lágrimas obligatoriamente.

Son estas películas las que nos hacen creer que el amor existe. Como los gringos dirían, esta es una “feel good movie” de las grandes. Nos hace creer en el amor imposible y nos alienta a repetir lo mismo con nuestras parejas. Aunque no tengamos a Demi, ni las chicas tengan a un Patrick apasionado. Es lo que hay.